Noticia de ABC.es del 17/01/2014
Identifican las sustancias químicas que las reinas de
especies como hormigas, abejas y avispas utilizan para esterilizar al resto de
la colonia desde hace más de 150 millones de años.
Las reinas de especies de insectos como las abejas, avispas,
abejorros y algunas hormigas utilizan la secreción de feromonas para
esterilizar al resto de la comunidad e impedir la reproducción de las obreras.
Ahora, científicos europeos han identificado estas sustancias químicas que
suprimen la capacidad reproductiva del resto de la colonia y han datado su
origen hace más de 150 millones de años, en unos insectos ancestrales. [...]
“Estas sustancias producidas por las reinas juegan un papel
esencial en la organización de las colonias ya que inhiben las capacidad
reproductiva de las obreras en especies como las hormigas, las avispas y
algunas abejas”, destaca Michel Chapuisat, científico de la Universidad de
Lausanna en Suiza y autor de otro de los trabajos.
En las investigaciones los expertos estudiaron los
compuestos químicos de la cutícula (esqueleto externo) de la hormiga del
desierto, la avispa común y el abejorro común. Los resultados mostraron que
varias sustancias concretas (hidrocarburos saturados como los alcanos) eran
producidas en mayor medida por las reinas de cada especie.
Tras observar esta diferenciación, los investigadores
rociaron con estas sustancias al resto de la colonia y descubrieron que, aunque
la reina no estuviera presente, las obreras seguían sin ser fértiles. Sin
embargo, en el grupo de control contrario, en el que los insectos no fueron
expuestos a estas feromonas, las obreras desarrollaron ovarios.
Feromonas contra la anarquía
“Estas sustancias tienen una especial importancia en la
división del trabajo reproductivo: por un lado la reina se reproduce y por otro
las obreras llevan a cabo otras tareas dentro de la colonia como son
vigilancia, cuidado de las crías, etc.”, describe Van Oystaeyen.
Los científicos recalcan que si las obreras comenzaran a
reproducirse, la colonia no sería capaz de mantener el orden y sería un caos.
“Si todos se reprodujeran, la colonia se caería a pedazos y no es así, no hay
anarquía". Estos productos químicos son muy importantes para mantener un
buen funcionamiento en la colonia”, define Van Oystaeyen. [...]
No hay comentarios:
Publicar un comentario
ATRÉVETE te agradece tu comentario.